
La empresa de lácteos Central Lechera Asturiana sustituye sus briks con su nuevo envase elaborado a partir de caña de azúcar.
El nuevo packaging tiene como objetivo reducir las emisiones de CO2, que se reducirán hasta un 20 % en comparación a los envases de plástico.
Actualmente un 70% de los envases de sus bebidas provienen de cartón de bosques sostenibles FSC, garantizando que su producción es responsable.
El nuevo brik cuenta con una capa de aluminio muy fina para conservar los productos y un tapón de caña de azúcar de origen también sostenible.

La disminución de plásticos vírgenes así como la lucha contra el cambio climático parte de sustituir y crear nuevos envases de origen sostenible.
La apuesta de Central Lechera Asturiana va más allá de su nuevo brik, identificando sus envases con etiquetas para mostrar sus ingredientes.
Una forma de ofrecer mayor transparencia a sus consumidores, demostrando que sus envases y productos están libres de ingredientes artificiales.
Otra de las novedades es su nueva etiqueta «Mira, huele, prueba» ubicada en sus envases y que tiene como objetivo luchar contra el desperdicio alimentario.
Central Lechera Asturiana tiene varios proyectos activos y sigue trabajando en crear otros nuevos para garantizar su Plan Integral de Sostenibilidad.
Neutralizar la huella de carbono en ganadería antes del año 2035 es otro de sus objetivos sostenibles en los que seguirán trabajando e innovando.